Promoviendo la Devoción a María

Mes a mes, numerosas familias tienen la gracia de recibir en sus hogares a la Imagen Peregrina de Nuestra Señora. Es una excelente oportunidad para que vecinos y amigos se reúnan para rezar el Santo Rosario, tal como lo había pedido la Virgen de Fátima a los tres pastorcitos. En cada hogar, los miembros de la familia coronan a la Imagen para simbolizar el deseo de que María sea verdaderamente Reina en sus corazones. De igual manera, numerosas instituciones públicas, hospitales y parroquias recibieron con entusiasmo la Imagen Peregrina; en medio de sus trabajos, en la oficina, en el taller, en la alegría o en la enfermedad, muchos costarricenses –tanto adultos cuanto niños- tuvieron el consuelo de recibir una celestial visita y pudieron detenerse al menos unos instantes a contemplar una mirada que les transmitía paz, confianza y fortaleza en medio de las mil vicisitudes de esta vida.

El coro y conjunto instrumental de los Heraldos del Evangelio estuvo también presente, revistiendo de solemnidad y alegría los lugares visitados, por medio del canto Gregoriano y la polifonía sacra. No podían faltar en nuestro repertorio los cantos dedicados la Virgen de Fátima, que fueron entonados con alegría por las todas las personas que nos acompañaron durante estas visitas.

 

mosaico peregrinaciones